Testimonios – Jesús nos escucha

MARIA LILIANA, Da las gracias porque pidió oración por otra persona que estaba con fuertes dolores de ciática y no se podía levantar de la cama. Estuvo con ella y dice que al día siguiente de haber pedido oración a nuestro ministerio de Intercesión Ejército de Gedeón,  se pudo levantar normalmente sin ningún dolor.

BENTIDO SEA DIOS POR SU GRAN AMOR DE PADRE, BENDITO SEA DIOS POR ESCUCHAR SU ORACION, BENDITO SEA DIOS.

BENDICIONES.

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Testimonios del Poder de Dios

Hola Hermanos:

Les compartimos estos testimonios que fueron dados en la última Misa al Espíritu Santo en Favor de los Enfermos y Afligidos del mes de Diciembre

EDUBIJES:
Ella nos cuenta que comenzó a concurrir a los grupos de oración y el Señor Jesús está sanando su relación con sus hijos, y le está dando una nueva vida. Ella está muy contenta de estar en el camino de Jesús.

CRISTIAN:
El 26 de noviembre se quedó sin trabajo. Pidió oración a la comunidad y clamó al Señor Jesús por otro trabajo. El 30 de noviembre lo confirmaron en un nuevo trabajo para la Gloria de Dios.

OMAR:
En marzo le descubrieron cáncer. Comenzó los tratamientos y hace tres meses fue invitado por un hermano de la comunidad a concurrir a la misa al Espíritu Santo de los primeros domingos de cada mes. El cáncer rápidamente se redujo en un 70%, se siente bien y nos cuenta que los médicos están sorprendidos por la evolución favorable de la enfermedad. Gloria a Dios

Testimonio: El poder de la Oración

Soy Fabricio y hace un año y medio que conozco al Señor gracias a la RCC en la ciudad de Villa Maria, Cba.

Quería compartir con ustedes hermanos, para gloria del Señor lo que hizo Él en mi vida.

En la oración personal el Señor en Su Palabra me decía que en los momentos de prueba tenga fe, pero yo no entendía a que pruebas se refería.

El 13 de junio del 2009 estaba en el trabajo cortando plástico con una circular fija, eran aproximadamente las 12 del medio dia y un plástico se quiebra y la circular corta mi dedo índice derecho entre la primera y segunda falange quedando sostenido solo por un pedacito de piel y en ese momento recordé la Palabra de Dios y comencé a Alabar a Dios, me encontraba solo en ese lugar, entonces tome la bicicleta y en ella me dirigí a la otra parte de la fabrica que queda aprox. 100m para que alguien me auxiliara (el dedo no sangraba).

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